Una condena penal cambia la vida de cualquier persona. Perder la libertad y ser arrestado trae consigo consecuencias mentales y físicas; además, daña la reputación del acusado. En la mayoría de los casos, los familiares y seres queridos también sufren los estragos de una sentencia. Cuando el acusado no es residente de los Estados Unidos incluso podría recibir una deportación y regresar a su país de origen. Por tanto, una condena penal es vista como el final del camino; sin embargo, esto no tiene por qué ser así.
Existen varios recursos legales a los que un sentenciado podría acudir para contrarrestar un juicio y sentencia inadecuados. Una de ellas es presentar una apelación ante un tribunal de justicia.
¿Una condena es el final? La apelación como respuesta ante una sentencia
Cada estado tiene sus propias leyes al respecto; sin embargo, todas las personas tienen derecho a presentar este recurso ante los tribunales de apelaciones. Este recurso solamente se presenta para contrarrestar errores legales o contra la propia aplicación de la ley en un tribunal inferior.
En este sentido, una apelación en caso de sentencias criminales puede solicitar lo siguiente:
- Eliminación del caso
- Solicitar que se considere iniciar un juicio nuevo
- Cambiar o anular la sentencia
- Evitar el pago de sanciones económicas (si aplica en el caso)
Frecuentemente, el sentenciado y su abogado aducen errores en la corte para contrarrestar la sentencia. También es común que se argumente violación a los derechos constitucionales del acusado por parte de otra figura de autoridad.
¿Cuánto tiempo tiene el acusado para presentar una apelación?
La apelación tiene como plazos para presentarse hasta 30 días después de establecida la condena. Es el abogado quien debe describir en un documento los errores que se cometieron en el tribunal donde se llevó a cabo el juicio del sentenciado. Por tal razón, en caso de que usted, un familiar o un ser querido haya recibido una condena, es imprescindible buscar inmediatamente representación legal.
La experiencia profesional en temas de defensa criminal le será de gran ayuda. Tome en cuenta los plazos para apelar, según cada una de las leyes estatales. Recuerde que recibir una condena criminal no es el final del camino. En la mayoría de los casos, existen recursos legales a los que asirse.