Cualquier persona que ha inmigrado a otro país sabe lo doloroso que es estar lejos de su familia. Aun con el milagro de las videollamadas, no es la misma cosa que tener a sus seres queridos cerca. Quizás usted ha invitado a sus familiares a venir a los Estados Unidos con usted, pero temen pasar por el proceso largo y abrumador de la inmigración.
La buena noticia es que existe un proceso por lo cual usted puede solicitar la inmigración de sus familiares, que les ayudará a calificar para la residencia. Dicho esto, es importante notar que este proceso solo funciona para algunos familiares específicos.
Los familiares de un ciudadano que califican
La lista de familiares que califican para la inmigración familiar depende del estatus migratorio de usted. Si usted tiene la ciudadanía estadounidense, sus opciones son mucho más amplias (enlace en inglés).
Bajo la ley de inmigración de los Estados Unidos, un ciudadano puede solicitar la inmigración de su cónyuge, sus padres, sus hijos, y sus hermanos si tienen por lo menos 21 años.
Los familiares de un residente permanente
Si usted tiene la residencia permanente, sus opciones son un poco más limitadas. En esta situación, usted podría solicitar la inmigración de su cónyuge, y de sus hijos no casados.
Aun así, esto no significa que no hay otras opciones para sus otros familiares. Hay una variedad de métodos que usted podría usar para ayudar a sus otros familiares a calificar para la residencia.
Aun con este proceso simplificado de inmigración familiar, no es fácil navegar el papeleo de una solicitud de inmigración sin el asesoramiento de un abogado con experiencia en asuntos de inmigración. Antes de empezar, la mejor opción es consultar a un abogado para analizar su situación y decidir cual es la mejor manera de proceder con su solicitud, para que usted pueda ser reunido con sus seres queridos y empezar un nuevo capítulo de la vida juntos.